lunes, 9 de noviembre de 2009

Jovenes:
* Recuerden que este sábado se suspende la reunión de jovenes.
* El sábado 21 es la convivencia en la iglesia de Tlalpan, la cita es a las 8:00am.
Se nos pidió estudiar los libros de Esdras y Nehemías, les invitamos a que en esta semana leamos completo el libro de Esdras.
* Si ustedes desean comentar sobre su estudio personal de la Biblia no necesariamente tiene que ser de los devocionales sino de cualquier pasaje o de lo que hayan aprendido en la semana.

Esdras

El libro de Esdras comienza donde termina el libro de 2 Cronicas. En el libro de Esdras vemos hacerse realidad la promesa de Dios. El pueblo regresó a la Tierra Prometida después de la cautividad babilónica de 70 años.

Arqueólogos que han estado excavando en el área del Templo en Jerusalén han descubierto parte de las paredes del Templo. Gran parte de las paredes fueron hechas de piedras grandes pulidas del tiempo del Nuevo Testamento. Pero de repente esas piedras dejaron de verse; y hay piedras más pequeñas, menos pulidas. Los arqueólogos creen que estas son piedras usadas para construir el Templo en el tiempo de Esdras.

5 comentarios:

Cynthia dijo...

El libro de Esdras es un estudio de lo que es un verdadero avivamiento. Cuando los hombres leen la Palabra de Dios y aplican a sus vidas sus verdades, cuando de los santos fluyen oraciones de intercesion, y cuando hay confesión y separación para hacer grandes cosas para Dios.

Quiera Dios que en nuestra iglesia existan muchos Esdras.

Iván dijo...

"no agradarnos a nosotros mismos"

en la vida parece ser que mientras uno esté contento con lo que hace, dice, adquiere; entonces todo está bien y todo es felicidad. Antes debemos ver que efectos tienen nuestras decisiones en la vida de los demás.
No seamos indiferentes a los demás, ni tampoco que al darnos cuenta de algún daño que podamos ocasionar a los demás, no nos importe detenernos para contentarnos con lo que queremos.

No se trata tampoco de cumplir caprichos de otros, o pasar por alto cosas malas. Sino mas bien pensar en hacer lo bueno con la mira de edificar al otro; ya sea dedicandome a animarlo, o a exhortarlo o a amonestarlo. Esto puede parecer pesado en algunas ocasiones y queremos evadir esto para no fatigarnos. Haciendo algo así y no comprometernos para ayudar a otros, sería también una forma de agradarnos a nosotros mismos y no pensar en el hermano débil.

Iván dijo...

Esdras 7:10. Esdras preparó su corazón, es decir se dispuso de voluntad propia a:

1.- inquirir en la ley de Jehová. estudiar y aprender cuidadosamente lo que Dios dice. No se aburría de leerla, no se distraía, se concentraba.

2.- cumplir la ley de Jehová. Ponía por obra lo que aprendía. La vida cristiana no se muestra detrás de un escritorio lleno de libros cristianos, ni dentro de 4 paredes. Es en la vida diaria, ante la gente, que se puede poner por obra lo estudiado. era notorio a los demás que Esdras vivía como Dios lo mandaba.

3.- para enseñar la ley de Jehová. Esdras era respetado y sus palabras se respaldaban con hechos, sin dar ocasión a ser señalado o contradecido en su testimonio. Nosotros queremos medio estudiar, medio cumplir, pero si nos ponemos exigentes al enseñar. Queremos que los demás hagan las cosas que nosotros no hicimos.
No hay mejor forma de enseñar que con el ejemplo y así podemos hacer que nos presten mas atención cuando enseñamos.
Recuerda: estudiar, vivir y enseñar. No te saltes alguno, síguelos en el orden.

Iván dijo...

Esdras 5:1,2
Los grandes deseos de edificar el templo, se fueron desvaneciendo con el tiempo debido a los problemas externos que se presentaron. Después, se le sumó la comodidad de no trabajar y también el pueblo empezó a pecar.

Como cristianos tenemos el mandamiento de edificarnos unos a otros, ya que somos templo de Dios.

Luchamos también en lo externo con los ideales del mundo, las costumbres, el qué dirán de mí, falsas doctrinas, etc. Y aveces decimos que es imposible un triunfo en esa lucha, pareciera que la palabra de Dios no basta para cambiar vidas y cambiar formas de pensar.
Esto, nos hace tener un desempeño a la baja, donde mejor preferimos la comodidad de no hacer mucho o nada.
A esto, le sumamos la luchas con nuestra carne, con la tentación, con nuestra voluntad, etc. Sin duda alguna mostramos que la obra de Dios ha fracasado.

En un momento así fue necesario que Dios enviara a los profetas Hageo y Zacarías para volverles a decir lo que Dios quería.

En nuestro tiempo tenemos la biblia inspirada por Dios donde encontramos enseñanza, consuelo, esperanza; donde su palabra es útil para corregir, convencer, para que no nos falte nada para hacer lo que es bueno.
Acudamos a la lectura de la biblia orando para que Dios nos de entendimiento. Y escuchemos a los que nos hablan acerca de Dios.

Cynthia dijo...

El pueblo de Israel había pecado tomando mujeres de otros pueblos. Ellos sabian que eso era incorrecto y sin embargo formaron una familia con esas personas, tuvieron hijos, vivian juntos, pasaban el día con ellos.
Familias enteras con hijos y tal vez pienso no todo era feo en sus casas, digo tuvieron que tener cosas bonitas como familia pero....a Dios no le agradaba.

Dios les pide dejar a su familia,que tremendo, dejar a la mujer con la que habías unido tu vida, a tus hijos sangre de tu sangre, no poder verlos crecer.

Drastico no? pero son las consecuencias de la desobediencia. Cuán diferente hubiera sido todo si ellos hubieran escogido una pareja dentro de la voluntad de Dios.

Cuidemonos de hacer mal las cosas, y si aún así insistimos en hacerlas no nos quejemos de las consecuencias.