Que el Señor les bendiga grandemente esta semana!!
7 comentarios:
Anónimo
dijo...
Un comentario dicho ya por uno de nuestros hermanos jóvenes varones: " Por eso ha venido sobre nosotros esta angustia". Recordemos antes que nada que la palabras dichas por Dios mismo son de que ÉL no puede ser burlado, todo lo que el hombre sembraré, eso segará.Y uno planta la semilla y recoge un plantío. Tarde ó temprano las acciones traen consecuencias, buenas ó malas. Es hora de estar a cuentas con el Dios, mismo que ha hablado; y hacer frutos dignos de arrepentimiento. Frutos del Espíritu. Andar en las obras buena preparadas para nosotros. No entristezcamos al Espíritu de Dios que mora en nosotros. No sea que después estemos en gran angustia. Que la historia de los hermanos de José nos hagan pensar para tomar decisiones sabias que agraden al Señor.
¿Qué es esto que nos ha hecho Dios? Decían los 10 hijos de Jacob que habían ido a Egipto a comprar víveres. Conocemos la historia y sabemos que las cosas no pintaban tan mal. Solo no sabían que el señor de aquella tierra era su hermano José. Aveces es necesario que pasemos por ciertas circunstancias sin saber en qué pararán las cosas: 1) Nos ayuda a reflexionar en nuestras vidas, en lo que hemos hecho mal. 2)Nos permite poner un alto a nuestra vida y comenzar a hacer lo correcto. 3) Nos hace mirar al Señor y confesarle nuestras faltas. 4) Nos hace depender de Dios.
Si estás pasando un momento malo, acude al Señor y no te alejes de Él. Si ya has salido de tu problema, da gracias a Dios y no te olvides de Él.
Después de tantos años la culpa del pecado que habían cometido los hermanos de José pesaba sobre ellos (Gn 42:21,22,28). Gracias a Dios que nuestras culpas las llevó en la cruz de Cristo y el pecado no nos asfixia más de esa manera, el Señor perdona y olvida nuestras transgresiones cuando hay arrentimiento sincero,aunque a veces las consecuencias de nuestro pecado las tenemos que arrastrar toda la vida, seamos sabios en nuestras decisiones para que "el mañana no tenga que reprocharnos el ayer".
45:5 "No os pese" Que difícil es pedir perdón y que difícil es perdonar. En la primera es dejar el orgullo, es reconocer el error; y en la segunda es olvidar lo sucedido. José tomó en cuenta que lo acontecido fué permitido por Dios para un propósito. Se dio cuenta de que ahora estaba en una condición mejor. Dos textos para la vida cristiana: Stg. 5:16 "Confesar nuestras ofensas unos a otros" y Lc. 17:3,4.
"No me enviasteis acá vosotros, sino Dios" "Dios me envió delante de vosotros para preservaros posteridad". Hay un Salmo que tiene una frase que me gusta mucho, dice: "Jehová cumplirá su propósito en mi" Salmo 138:8 y Rom. 8:28 dice que "A los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien" José tal vez no comprendió la totalidad de las cosas cuando le sucedían: Al ser vendido por sus hermanos, estar en la cárcel, etc. Pero ahora podía reconocer que todo estuvo dentro del plan de Dios en su vida, pero él también todo ese tiempo fue fiel, agradó a Dios en todo y ahora podía disfrutar de las bendiciones que Dios le tenía preparadas, como más adelante veremos, el estar con su familia de nuevo. Confiemos en que Dios tiene cosas hermosas para nuestras vidas y que cumplirá su propósito en nosotros.
Mi comentario es acerca del versiculo que dice: verdaderamente hemos pecado contra nuestro hermano pues vimos la angustia de su alma... y no le escuchamos, y bueno esto me hace pensar en nuestros hermanos de la congregación, cuantas veces nos preocupamos u oramos por ellos,por alguna necesidad o problema que tienen, hay ocasiones que no nos damos el tiempo para escucharles, asi que amemos a nuestros hermanos de hecho y en verdad.
pocos y malos han sido los años de mi vida. Gn.47:9. Honra a tu padre y a tu madre para que te vaya bien y seas de larga vida sobre la tierra. Acuérdate de tu creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, y lleguen los años en los cuales digas: No tengo en ellos contentamiento. Alégrate, joven, en tujuventud, y tome placer tu corazón en los días de tu adolescencia; y anda en los caminos de tu corazón y en la vista de tus ojos; pero sabe, que sobre todas estas cosas te juzgará Dios. Quita, pues, de tucorazón el enojo, y aparta de tu carne el mal; porque la adolescencia y la juventud son vanidad.
7 comentarios:
Un comentario dicho ya por uno de nuestros hermanos jóvenes varones:
" Por eso ha venido sobre nosotros esta angustia".
Recordemos antes que nada que la palabras dichas por Dios mismo son de que ÉL no puede ser burlado, todo lo que el hombre sembraré, eso segará.Y uno planta la semilla y recoge un plantío.
Tarde ó temprano las acciones traen consecuencias, buenas ó malas.
Es hora de estar a cuentas con el Dios, mismo que ha hablado; y hacer frutos dignos de arrepentimiento. Frutos del Espíritu. Andar en las obras buena preparadas para nosotros.
No entristezcamos al Espíritu de Dios que mora en nosotros. No sea que después estemos en gran angustia.
Que la historia de los hermanos de José nos hagan pensar para tomar decisiones sabias que agraden al Señor.
¿Qué es esto que nos ha hecho Dios?
Decían los 10 hijos de Jacob que habían ido a Egipto a comprar víveres. Conocemos la historia y sabemos que las cosas no pintaban tan mal. Solo no sabían que el señor de aquella tierra era su hermano José.
Aveces es necesario que pasemos por ciertas circunstancias sin saber en qué pararán las cosas:
1) Nos ayuda a reflexionar en nuestras vidas, en lo que hemos hecho mal.
2)Nos permite poner un alto a nuestra vida y comenzar a hacer lo correcto.
3) Nos hace mirar al Señor y confesarle nuestras faltas.
4) Nos hace depender de Dios.
Si estás pasando un momento malo, acude al Señor y no te alejes de Él.
Si ya has salido de tu problema, da gracias a Dios y no te olvides de Él.
Después de tantos años la culpa del pecado que habían cometido los hermanos de José pesaba sobre ellos (Gn 42:21,22,28). Gracias a Dios que nuestras culpas las llevó en la cruz de Cristo y el pecado no nos asfixia más de esa manera, el Señor perdona y olvida nuestras transgresiones cuando hay arrentimiento sincero,aunque a veces las consecuencias de nuestro pecado las tenemos que arrastrar toda la vida, seamos sabios en nuestras decisiones para que "el mañana no tenga que reprocharnos el ayer".
45:5 "No os pese"
Que difícil es pedir perdón y que difícil es perdonar.
En la primera es dejar el orgullo, es reconocer el error; y en la segunda es olvidar lo sucedido.
José tomó en cuenta que lo acontecido fué permitido por Dios para un propósito. Se dio cuenta de que ahora estaba en una condición mejor.
Dos textos para la vida cristiana:
Stg. 5:16 "Confesar nuestras ofensas unos a otros" y Lc. 17:3,4.
"No me enviasteis acá vosotros, sino Dios" "Dios me envió delante de vosotros para preservaros posteridad". Hay un Salmo que tiene una frase que me gusta mucho, dice: "Jehová cumplirá su propósito en mi" Salmo 138:8 y Rom. 8:28 dice que "A los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien" José tal vez no comprendió la totalidad de las cosas cuando le sucedían: Al ser vendido por sus hermanos, estar en la cárcel, etc. Pero ahora podía reconocer que todo estuvo dentro del plan de Dios en su vida, pero él también todo ese tiempo fue fiel, agradó a Dios en todo y ahora podía disfrutar de las bendiciones que Dios le tenía preparadas, como más adelante veremos, el estar con su familia de nuevo. Confiemos en que Dios tiene cosas hermosas para nuestras vidas y que cumplirá su propósito en nosotros.
Mi comentario es acerca del versiculo que dice: verdaderamente hemos pecado contra nuestro hermano pues vimos la angustia de su alma... y no le escuchamos, y bueno esto me hace pensar en nuestros hermanos de la congregación, cuantas veces nos preocupamos u oramos por ellos,por alguna necesidad o problema que tienen, hay ocasiones que no nos damos el tiempo para escucharles, asi que amemos a nuestros hermanos de hecho y en verdad.
pocos y malos han sido los años de mi vida. Gn.47:9.
Honra a tu padre y a tu madre para que te vaya bien y seas de larga vida sobre la tierra.
Acuérdate de tu creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, y lleguen los años en los cuales digas: No tengo en ellos contentamiento.
Alégrate, joven, en tujuventud, y tome placer tu corazón en los días de tu adolescencia; y anda en los caminos de tu corazón y en la vista de tus ojos; pero sabe, que sobre todas estas cosas te juzgará Dios.
Quita, pues, de tucorazón el enojo, y aparta de tu carne el mal; porque la adolescencia y la juventud son vanidad.
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